jueves, 25 de septiembre de 2014

Tengo más formas de volar
que zapatos que ponerme.
Y en muchas de ellas
estoy sola,
llena o vacía,
desnuda o vestida,
a veces,
frente al espejo.
Aún así no se esconden mis alas
ni mis verdades
que son,
creo yo,
un poco lo mismo.
Y subo como la Luna
para volver a bajar
a la hora correcta
e intentar
que el sol
no me queme
más de la cuenta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ven, que vamos a hacer un pacto yo y tu sonrisa.