La tos se me ha agarrado al pecho,
como yo me agarro al humo,
fuerte, desquiciada,
haciéndole el amor todos los días,
sin saciarme, sin decir nunca
vale, ya es suficiente.
El aire tiene mil trabas
para llegar a mi
pero lo consigue,
lo consigo
y seguimos bailando cada noche
intentando no pisarnos
los pies
ni la cabeza.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Ven, que vamos a hacer un pacto yo y tu sonrisa.