Allí estaba el mago mirándome
como una advertencia
como una realidad cumplida
como diciendo
"Sabes lo que hay
lo que está por haber"
Traté de mirar sus manos
e ignorar su sonrisa,
su mantra de palabras
pero cuando vine a darme cuenta
ya estaba rota
sobre el asfalto
ya estaba muerta
en vida,
ya me había robado todo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Ven, que vamos a hacer un pacto yo y tu sonrisa.